La Sección de Enseñanza de CGT Burgos entra con fuerza en la Junta de Personal
En las elecciones a la Junta de Personal Docente no Universitario celebradas el pasado 4 de diciembre, CGT ha entrado con dos delegadas, siendo el sindicato que más ha crecido en votos, tanto en términos absolutos como en términos porcentuales. El resto de sindicatos que ya formaban parte de la Junta de Personal han perdido votos, y en su mayor parte de forma muy significativa, a excepción de Stecyl que experimenta un incremento menor del 2%.
A nivel de Castilla y León, CGT ha sido, con diferencia, la organización sindical que más ha crecido en número de delegados y delegadas: hemos pasado de 4 a 14 representantes. Nunca antes se había visto un crecimiento tan espectacular de una organización sindical en el ámbito educativo público de nuestra región: CGT ha logrado un 60% más de votos.
El resultado de las elecciones muestra también el descontento del profesorado con los sindicatos que tradicionalmente han conformado los órganos de representación: han votado 2.000 docentes menos que hace 4 años a nivel regional y unos 250 menos a nivel provincial. Este abstencionismo muestra el cansancio de muchos docentes hacia unos sindicatos jerárquicos que funcionan más como asesorías que como defensores de los derechos de todos y todas.Con su entrada en la Junta de Personal, la Sección de Enseñanza de CGTBurgos se compromete a hacer llegar a los centros lo tratado y acordado en la Junta de Personal, algo que se viene reclamando desde hace cuatro años. Este es el primer paso para la concienciación y la movilización desde la base.
Las claves del apoyo recibido por CGT están en su combatividad así como en la defensa exclusiva de la Escuela Pública, siendo el único sindicato que de forma ininterrumpida y sin complejos ha formado parte de la Plataforma por la Escuela Pública, Laica y Gratuita en Burgos desde sus comienzos.
Entre las denuncias planteadas durante lo que llevamos de curso destacan las referentes a los recortes en la escuela rural; la falta de medios en los ciclos formativos; la tardía cobertura (de hasta un mes) de algunas plazas a principio de curso; la precariedad laboral con tasas de interinidad por encima del 20% y contratos por un quinto de jornada; el retraso en el pago de la nómina a los interinos en septiembre; la chapuza e improvisación en la implantación del Bachillerato de Excelencia en Burgos a base de detraer recursos de otros alumnos y alumnas; la incoherencia en el empleo de recursos por parte de la Consejería que, tras haber recortado en apoyos, refuerzos, compensatoria, profesores terapéuticos..., decide gastarse 2,8 millones de euros en el programa Gradua2; la insuficiencia de administrativos en los centros educativos, así como el rechazo a la LOMCE.
También se han promovido reclamaciones para poder seguir disponiendo de la tarjeta docente que los centros están obligados a facilitar según el artículo 104.3 de la LOE, vigente por no haber sido derogado por la LOMCE, rechazando por tanto la tarjeta bancarizada que la Consejería trata de imponernos; así como reclamaciones para que le sea reconocida la primera guardia lectiva a los docentes de los Centros Integrados de Formación Profesional y de la Escuela de Arte, siendo Burgos la única provincia donde se incumplía dicho acuerdo de la mesa sectorial.
Entre los temas en los que CGT seguirá trabajando están la paralización del borrador del Real Decreto de especialidades, que amplía el abanico para que el profesorado pueda impartir otras especialidades distintas a la suya, independientemente de su preparación técnica, pedagógica y didáctica; la recuperación de recursos humanos y materiales para los centros, sin olvidarnos de la difícil situación de la escuela rural y los ciclos formativos; la reducción de las ratios; la cobertura de sustituciones desde el primer el día; la tasa de reposición del 100% y la paralización de la imposición de caterings de línea fría en los centros, volviendo a un servicio público de comida caliente.